Entrevista con Cejna Alwoz, miembro del Movimiento de Mujeres del Kurdistán, sobre la historia de los enlaces entre el movimiento kurdo y de Abya Yala, y su perspectiva para la conferencia de mujeres en 2026.
Los lazos entre el Movimiento por la Liberación del Kurdistán y los movimientos de Abya Yala —los de las mujeres, los pueblos indígenas y los jóvenes— son muy fuertes. La distancia física es grande, pero los corazones y las luchas siguen estando cerca. ¿Podría decirnos algo sobre la historia de estas conexiones? ¿Cuál es la razón de la fuerza de esta relación?
El movimiento de mujeres del Kurdistán, sobre todo a partir de los años 2000, se puso a extender sus relaciones, porque se había formado el partido de mujeres, y eso significó también que, como partido, se implicaba más en la vida de la sociedad y en las relaciones con otros movimientos. Es verdad que en los años 90 ya hubo iniciativas, como una conferencia en 1994 que juntaba a movimientos de mujeres que estaban luchando con armas en contra de su opresor. Entonces, había esfuerzos en este sentido ya, y también delegaciones que iban a visitar diferentes países. Pero después de 2000, la formación del Partido de las Mujeres Libres – es decir, un partido que tiene como prioridad la búsqueda de la libertad de las mujeres – eso se intensificó y se pensó más ampliamente. Me recuerdo que creamos el contrato social de las mujeres, y cuando lo escribíamos, teníamos ya relación con diferentes movimientos, seguíamos lo que hacían de lejos. Les mandamos nuestro contrato para que compartieran sus perspectivas. No teníamos muchas posibilidades ni recursos, pero había este tipo de iniciativas. Para llegar a las mujeres del mundo, creamos estos contactos. Estos esfuerzos tomaron otra dimensión organizativa con la declaración del nuevo paradigma del confederalismo democrático en 2005. A partir de ahí, el trabajo internacional se intensificó aún más. Planificamos de forma organizativa este trabajo, es decir, que dimos como misión a algunas compañeras de crear y seguir los vínculos con otros movimientos de mujeres. Ya no fue algo aleatorio. Después, con la revolución de Kobanê en 2015, había muchas internacionalistas que llegaron a Rojava. Y, de la misma manera, compañeras fueron a Abya Yala. Tomaron esta responsabilidad, tanto para conocer como para organizar la solidaridad alrededor del movimiento kurdo. Entonces hicimos encuentros, compartimos experiencias en Cuba, y sobre todo con Heval Lêgerîn, el movimiento fue más conocido.
El papel de heval Legerîn (Alina Sanchez, compañera Argentina que formó parte de la Revolución en Rojava, y cayó mártir por la libertad de las mujeres en marzo del 2018) fue muy importante. En 2016, un grupo de compañeras fue ahí para organizar el trabajo de solidaridad, y pues en 2017 fue una delegación de Jineolojî a Abya Yala. Ahí pudimos compartir la rica experiencia del movimiento kurdo, tanto en el ámbito filosófico como en el ámbito práctico. La resistencia de Rojava ya había resonado ahí, como nuestra estrella, destellaba hacia las regiones más lejanas. La gente se informó, y nuestra voz llegó al mundo.
A través del trabajo con los comités de solidaridad, vimos que, más allá de la solidaridad, compartimos pensamientos parecidos. Cuando contamos nuestra historia en seminarios, no hablamos solamente para que se nos escuche, pero quisimos compartir nuestra experiencia y quisimos aprender de la suya también. Nos llamaba mucho la atención. Y lo que vimos en las discusiones durante los seminarios es que nuestros pensamientos y nuestras experiencias se parecían.
Nuestros destinos se parecían: nuestras formas de luchar, la aspiración al Xwebûn (ser una misma). Nosotras decimos paradigma, y ellas dicen cosmovisión, nosotras decimos que defendemos la tierra, ellas dicen Pachamama. Muchas cosas estaban muy cerca. La delegación Jineolojî estaba trabajando en eso: no hace falta que una utilice exactamente los mismos términos o definiciones, pero ¿cómo podemos llevar los pensamientos de Abya Yala a Kurdistán, y los de Kurdistán a Abya Yala? Discutimos sobre todo de eso.
En Abya Yala y Kurdistán, tanto los ataques fascistas como los del colonialismo se parecen también. Por ejemplo: las personas desaparecidas en Argentina, las madres de la Plaza de Mayo, las madres del sábado en Kurdistán, la lucha por la defensa del territorio en Abya Yala, como lo hizo, por ejemplo, Berta Cáceres, y nuestra lucha para proteger el valle de Hasankeyf, que fue inundado por la construcción de una presa. Todas las historias que escuchamos nos enseñaron que vivimos el mismo dolor, la misma cosa. Se parece también a la nuestra su manera de relacionarse con la sociedad, no como las activistas en Europa. Vimos en todos estos aspectos cuanto nos parecíamos.
Pero vimos también diferencias de las que aprendimos. Por ejemplo, antes, siempre cuando hablamos de nuestra lucha, nos referimos a los argumentos europeos. No porque estuviéramos de acuerdo con ellos, pero porque siempre tomábamos posición con respecto a la perspectiva occidental, para dejar claro nuestro punto: «Pretendéis que es así, pero no lo es». Queríamos probarnos frente a la mentalidad europea. Eso es algo que entendí mucho más con los movimientos en Abya Yala. Y aprendimos que no tenemos que referirnos a los filósofos o a los argumentos que usan los europeos, solamente tenemos que hablar de nosotras, directamente. Ellas también lo hacen así. Eso fue la lección más importante de Abya Yala. Y siempre estaban muy abiertas con nosotras y con la solidaridad con Kurdistán.
Nació una relación estratégica y muy profunda entre nosotras, nos acompañábamos, vinieron hasta Europa para participar en seminarios, vinieron para entrevistas con el movimiento. Nos conocimos cada vez más, y no solamente a través de representantes, sino que conocieron la realidad del movimiento. Y poco a poco, algunas compañeras, algunos movimientos estaban convencidas del paradigma. Este paradigma, que desarrolló Rêber Apo, abre una perspectiva de lucha de liberación que una pueden llevar a sus propios países. Pero no para imitar, copiar de forma esquemática, sino de forma profunda. Con esta base, compañeras de Abya Yala vinieron a las conferencias en 2018 y 2022 como delegación. No co-organizaron, pero vinieron para compartir experiencia. Y este enlace siguió, se profundizó. Había organizaciones feministas, de defensa de la tierra, pueblos indígenas… Y esta relación sigue profundizándose.
La reflexión alrededor del confederalismo de mujeres en Abya Yala empezó recientemente. En 2024 lanzamos la propuesta y se abrió un diálogo. A partir de ahí, esta perspectiva del confederalismo democrático guiaba nuestras discusiones en Abya Yala. Porque esta perspectiva no la necesitamos solamente nosotras. Es verdad que los pueblos están llevando una lucha muy fuerte en Abya Yala, sobre todo los pueblos indígenas. Pero muchas se organizan con ideas que llegaron de fuera e inspiraron procesos organizativos, como el marxismo y el feminismo. Si una ideología no corresponde realmente a un territorio, no puede tener el impacto deseado.
Nuestro objetivo no es importar el Confederalismo Democrático como una ideología desde fuera. Nosotras pensamos que el confederalismo ya existe en Abya Yala. Debería guiar la vida, y eso solamente es posible si se organiza, y se desarrolla conocimiento al rededor de eso. A veces decimos así fácilmente, que ya está, ya existe. En Kurdistán también existe. Pero si no hay un método organizativo, conocimiento, una acción con estrategia a largo plazo, pues esta raíz no puede crecer. Esta raíz siempre se quedará bajo la tierra. Este es nuestro objetivo, y ahí es nuestra diferencia. No queremos hacernos una plantilla que se copie. Decimos que el confederalismo existe en Abya Yala, y según su cultura, pueden desarrollar más conocimiento alrededor de este, según su fuerza, su lucha.
Cuando se tocan dos mundos, dos ideas, pues empieza una transformación. No se cambia solamente un lado. Cuando hay un contacto, intercambio, nada queda como antes. Siempre se produce un cambio en ambos lados. Las compañeras que ya están convencidas de esta perspectiva, trabajan por sí mismas. No actúan según lo que decimos nosotras. Sobre todo, tenemos discusiones con los pueblos indígenas, porque las luchas más fundamentales en Abya Yala son las de los pueblos indígenas. Trabajamos conjuntamente y son nuestra alianza principal.
Hay también las luchas de izquierda, feministas, ecologistas. Tenemos también vínculos con estos movimientos. Es una característica del Movimiento de Mujeres del Kurdistán: vamos a un sitio, creamos contacto con un grupo, pero vamos también a encontrar a otros grupos. Y estos grupos queremos que se encuentren y se conozcan. A veces, vamos a sitios y creamos encuentros entre dos grupos que antes no se conocían. Porque nuestro esfuerzo siempre va en este sentido, y es nuestra manera de trabajar: de siempre fortalecer la sociabilidad, y de ver lo que tenemos en común. Porque el Confederalismo Democrático es eso. Se trata de trabajar en nuestros objetivos conjuntamente, a pesar de las diferencias, y los humanos pueden vivir juntos, tomar decisiones, eso es fundamental.
En Abya Yala confluyen muchas luchas,muchos movimientos. Son cientos, miles de luchas que existen y toman muchas formas diferentes. No podemos decir que llegamos a todas. Pero intentamos entender y conocer más. Pero en todos los países, hemos llegado a crear vínculos con una gran diversidad de movimientos. Y este trabajo sigue, es un trabajo que aún continúa. Corresponde a los principios del Confederalismo Democrático. Cada movimiento puede volverse en una alianza.
Pero cuando nos organizamos juntas, puede ser que nazcan puntos de desacuerdo, y eso es normal. No tenemos que adaptarnos totalmente al otro, o el otro a nosotras. Pero lo importante es cómo podemos entendernos mutuamente. Hay luchas feministas populares, pero dentro de los pueblos indígenas, la lucha de mujeres, la libertad de las mujeres no está en el centro de la lucha. Eso hay que cambiarlo, pensamos. Tiene que ser un asunto principal.

Es conocido que el movimiento de mujeres kurdas nunca se ha limitado a la lucha por la libertad del Kurdistán, sino que siempre se ha guiado por la perspectiva de la lucha de las mujeres en todo el mundo. Y ahora, bajo el liderazgo del líder Apo, ha surgido la perspectiva de un confederalismo de mujeres en todo el mundo. ¿Por qué se está haciendo tanto esfuerzo por construir un confederalismo democrático para las mujeres de todo el mundo? ¿Cuál es la esencia de esta perspectiva?
El confederalismo mundial de las mujeres, el modelo del Confederalismo Democrático para el siglo 21, después de tanta práctica de lucha, tanta teoría, puede hacer parte de la respuesta. Puede responder a las necesidades y los problemas de las sociedades a largo plazo. Es un modelo de vida, no solamente un sistema alternativo. El sistema a veces ataca a la sociedad, y a veces la sociedad vive en paz con el Estado. Pero esta forma de vivir existe a largo plazo, y en todas las partes del mundo. Creemos en eso. Y nuestro objetivo es compartir estas ideas. Por ejemplo, en Abya Yala, existe mucha lucha, hay mucha resistencia, no se rinden al sistema; pero cuando una resistencia no está suficientemente pensada, pues todos estos esfuerzos no llegan al resultado. Es por eso que, cuando hablamos del Confederalismo Democrático en Abya Yala, es para que no sirva solamente los intereses del pueblo kurdo. Sino, es apoyar los procesos de lucha de todos los pueblos, que fortalezca estos movimientos, y contribuir conjuntamente a la construción de una solución a largo plazo.
A veces se nos hizo la pregunta en Abya Yala: ¿por qué estáis aquí? Nosotras pensamos que este modelo puede traer respuesta a los problemas de los pueblos, porque incluye la autogestión, el conocimiento, la filosofía, la comprensión de sí misma, de su historia, la conexión con sus raíces. Esta búsqueda corresponde a Abya Yala. Muy rápidamente, este pensamiento podría llevar a resultados. Pero no como una ideología que se impone desde fuera, sino que este pensamiento puede jugar el papel de un puente.
Como también dijo el líder Apo, que el siglo XXI sea el siglo de la revolución de las mujeres. Las mujeres de Abya Yala siempre han librado una fuerte lucha, especialmente en los últimos años. Desde la perspectiva del movimiento de mujeres kurdas, ¿cuál es el papel del movimiento de mujeres de Abya Yala a nivel mundial?
Las mujeres de Abya Yala son un ejemplo, con su resistencia, siempre. Eso es lo primero. No se rinden a la modernidad, y así se volvieron en ejemplo. Cuando hay ideas que llegan de Europa, o estilos de vida nuevas, puede ser que influya a grupos, pero siempre van a conservar un vínculo fuerte con sus raíces. Estas raíces están todavía muy fuertes. Y con esta característica pueden tener un gran impacto y dar inspiración al mundo entero, porque comparten sus críticas de la modernidad de forma muy abierta. Las sociedades son muy sanas, claras, en el sentido que no tienen miedo de confrontarse con sus propias debilidades y de hablarlas. Si hay fallos y derrotas en la sociedad, no tienen miedo de compartir esto. Son muy claras.
Todo eso son características muy bellas, y la modernidad no ha conseguido destruirlas. Por eso dan inspiración al mundo entero. Pero a veces, esta inspiración se queda a un nivel abstracto que no permite pensar como fortalecer la lucha. Y eso pues no permite a esta sociedad o a este movimiento ver sus propias faltas. Pero lo que veo sobre todo es que son pueblos claros en sus perspectivas. Vinculados a sus raíces, que siempre están de pie, luchando. Si no hay lucha, si una mujer en Abya Yala no lucha, no puede vivir. Por eso se dice: por la vida. Es una realidad muy clara, como en Kurdistán. Si una no lucha, no puede vivir. Hay ataques en contra de sus cuerpo, sus tierras, sus economías, el agua. La sociedad lo sabe, y es por eso que siempre están en movimiento. Hay esta noción de la alegría militante. Es algo que veo mucho en Abya Yala. Y de dónde viene esta alegría? De una vida llena de sentido, una vida en búsqueda, que tiene claro lo que acepta y lo que rechaza. Viene de ahí. Y en este continente hay mucha de esta alegría. La vida es clara. Simple. Se expresa de forma clara. Eso son grandes ventajas, que pueden tener un impacto muy fuerte. Que una sea politizada o no, toda la sociedad está tocada por eso y aprende de eso.
¿Cuáles son sus esperanzas y expectativas para la conferencia de Abya Yala?
Tengo muchas expectativas para la conferencia. Los trabajos preparativos llevan un año ya. Y las compañeras que trabajan en eso lo hacen con mucha convicción. La convicción es lo más importante para construir algo. Un grupo de 40 personas, que cada uno ve las cosas de forma diferente, no va a ir muy lejos, pero un grupo de 2 personas con una convicción fuerte puede lograr muchas cosas. Todas las compañeras que participan en los trabajos preparativos, los movimientos, las organizaciones, todas tienen una convicción muy fuerte. Dan mucho esfuerzo, y llevan mucha responsabilidad. Eso puede puede volverse un ejemplo, porque en las otras conferencias, en Frankfurt y Berlín, hicimos el error de no compartir más la responsabilidad. No queremos repetir este error. Hay muchos trabajos que se hacen simultáneamente, se rompen la cabeza, hacen esfuerzo tanto físico como intelectual. Entonces tengo muchas expectativas, sobre todo porque, como lo dije antes, esperamos que cree algo a largo plazo para el Confederalismo Democrático. Y no se necesitará más a nosotras para dar motivación, sino que los pueblos por sí mismos son su propia semilla. Una organización que puede hacer este trabajo por sí misma. Tenemos esta esperanza. Y es este el objetivo. La idea no es de reproducir el Confederalismo Democrático como lo hace el movimiento kurdo. No de esta manera. Si no, tomando esta experiencia como punto de partida, juntando a organizaciones, a movimientos, para ampliar la red, para que todas, que formen parte de esta, pequeños grupos y grandes movimientos, puedan apoyarse mutuamente.
Haz posible la Conferencia de Mujeres 2026: Desde Abya Yala a Kurdistán, tejemos futuro
Si crees que otro mundo es posible, con las mujeres en el centro, apoya este poderoso encuentro de mujeres diversas del Abya Yala!
En febrero de 2026, cerca de 500 mujeres viajarán a Bogotá desde distintos pueblos y ciudades de Abya Yala (o Latinoamérica) para hacer posible esta poderosa Conferencia de la Red de Mujeres Tejiendo Futuro, la cual caminamos de la mano de las mujeres libres del Kurdistán. Un espacio impulsado para que brote toda la sabiduría de las mujeres, que ha estado enterrada durante siglos, y que hace posible una sociedad más bonita, libre y del tamaño de nuestros sueños. La Madre tierra agradece este encuentro porque lo hacemos para cuidarla de la depredación mientras damos vida a un camino conjunto para la defensa de nuestros cuerpos y nuestros territorios.
Montar una olla al desayuno, al almuerzo y a la comida para cientos de bocas, y sus hijos; pagar el hospedaje o los boletos de avión de unas cuantas; aterrizar una ruta de traducción para comunicarnos entre los tantos idiomas que estarán presentes; reunir los materiales pedagógicos suficientes para leer el recorrido de nuestras ancestras, comprender la tarea histórica que tenemos y dibujar el futuro… Todos estos son costos millonarios a los que nos acercamos con tus aportes.
Te invitamos que te unas en un mismo latido con la Conferencia “Floreceremos porque la guerra no puede acabar con nuestras raíces. De Abya Yala a Kurdistán, la lucha de las mujeres frente a la destrucción de la vida».

Enlace a la publicación original, en la página web de Mujeres Tejiendo Futuro: https://womenweavingfuture.org/abya-yala/entrevista-con-cejna-alwoz
Enlace al crowdfunding: https://womenweavingfuture.org/abya-yala/crowdfunding
